Foguerons de Sant Antoni en Barcelona

VALENTINA ELORZA - El eco de los Foguerons de Sant Antoni  tardó 10 días en recorrer unos 200 km. El pasado sábado 26,  y como ya es tradición, se hizo una repetición de la “Revetlla” en Barcelona, concretamente  en el Barrio de Gracia. Los Foguerons de Sa Pobla llevan instalándose en esta ciudad desde 1993, nada si contamos que llevan celebrándose en el pueblo desde el siglo XIII. El programa anunciaba degustaciones de gastronomía mallorquina, una noche de glosses, un baile popular, una exposición, marionetas... Poniendo punto final con los tradicionales pasacalles y hogueras, amenizados por bailes y cantos populares a cargo de los grupos Abeniara de Felanitx, S’estol de Jericó y les Colles de xeremiers.

El ayuntamiento y las diferentes organizaciones ponían el fuego y todo lo que hacía falta para torrar, así que solo cabía preocuparse de traer la carne incluyendo por supuesto sobrasadas y butifarrones, y la bebida (aconsejo, si pensáis ir el año que viene, que os procuréis unas pinzas y una graella).

Todos estaban invitados a la Fiesta con los diferentes mails que decían: “Vamos a intentar juntarnos todos los que podamos, mallorquines y los que no lo son, cuantos más mejor”. Amigos ofreciéndose a comprar la carne, pidiendo que se reenviara el mail y se informará a cuanta más gente mejor.

¿Por qué tanta preocupación, o mejor dicho, predisposición para la fiesta? El que ha vivido Sant Antoni o ha estado en su sinónimo en términos de celebración Sant Sebastia, sabe por qué es. Seguramente en tu infancia saliste con tus padres por las calles de Palma y viste dragones, escuchaste música y te fuiste a dormir más tarde que nunca y lleno de excitación. Luego, ya un poco más crecidito/a, es probable que fuese la primera noche en la que, aunque tus padres estaban por la zona, estabas sólo/a con tus amigos y te sentiste muy mayor. Ya de adolescente quedabas con todos y esperabais a que empezara el concierto del grupo de moda, mientras intentabas buscar a la chica o al chico que te gustaba. Luego creciste y a lo mejor dejaste de ir porque los grupos no concordaban con tu rollo musical. Ahora, cuando alguien te dice “mañana son Los Foguerons”, piensas en todos los buenos recuerdos y dices “allá vamos a darlo todo”…